La Habana, 30 de Junio de 2014
A todos los interesados:
Durante los últimos días hemos sido contactados por un gran número de amigos de todas las latitudes. Como denominador común todos nos han enfatizado y reiterado su apoyo y cercanía, y nos han convocado, con insistencia, a que continuemos trabajando públicamente a favor del bienestar de Cuba. A este pedido de gran cantidad de personas, se une nuestra vocación personal de servicio público a la nación cubana, necesitada actualmente de metodologías que pongan énfasis en el acercamiento, el diálogo y el acuerdo entre cubanos, así como del mejoramiento de las relaciones de la Isla con el resto del mundo. Es por ello que hemos decidido enfrascarnos en la edificación de un nuevo proyecto encaminado a conseguir estos objetivos.
Esta iniciativa llevará por nombre Cuba Posible. Hemos llegado a este consenso porque estamos convencidos de que el país siempre contará con el esfuerzo de sus hijos para construir la Casa Cuba, esa bella metáfora de monseñor Carlos Manuel de Céspedes. En este sentido, el sacerdote cubano aconsejó que: “Un proyecto de cambio transicional, para nuestro país, será tanto más eficaz cuanto mejor consiga la concertación de las voluntades presente en la Cuba contemporánea.”
De esta manera queremos hacer patente el compromiso con la promoción del encuentro y la concordia entre cubanos; la práctica de la dignidad humana de cada compatriota, mediante el ejercicio responsable de la libertad, la igualdad y la solidaridad; el desarrollo de la cultura y la educación de todos los ciudadanos; el avance económico del país; la búsqueda sistemática de maneras más efectivas para socializar la riqueza espiritual y material que seamos capaces de crear; el fomento de criterios diversos y la integración de lo mejor de los mismos; el diseño continúo de una democracia cada vez más plena; así como el mejoramiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, Europa y América Latina.
Para gestionar los objetivos anteriores estructuraremos una plataforma que nos permita socializar y canalizar las inquietudes, los criterios y las propuestas de cubanos y extranjeros que guarden comunión con dichos principios. Aspiramos a que los participantes se identifiquen entre ellos e interactúen con la sociedad civil cubana, con grupos de la diáspora y con otras entidades en el extranjero, siempre por medio de un diálogo abierto y plural que busque la concertación.
Sabemos que el camino que iniciaremos no será fácil. Sin embargo, lo asumiremos confiados y serenos, teniendo al respeto y a la transparencia como los estandartes de nuestro quehacer.
En estos momentos trabajamos en la organización intelectual, técnica y formal del proyecto. Creemos firmemente que la restitución de la confianza entre cubanos, y entre Cuba y el mundo, así como la despolarización del campo político abrirán las puertas del futuro. Cuba Posible trabajará intensamente en la edificación de una patria mejor.
Lenier González y Roberto Veiga